16 de enero de 2012

El Plan. Parte 3

De nuevo con vosotros con la tercera y última parte de "El plan", esta vez con la frase de Roc "No llores, era sólo una historia para que te comieras las acelgas." Eso sí, esta vez no es la frase de comienzo si no la del final.


Para los que no han leído las otras dos partes aquí los enlaces: El plan (parte1), El plan (parte 2).
Al final de cada historia está el enlace a la parte siguiente, que lo disfrutéis tanto como yo lo he disfrutado escribiendo. 

Al paso de las semanas el plan tomaba su forma, tanto para Bill como para los demás, aunque cada vez habían más rencillas y desconfianza en el grupo. Bill sabía poner a todo el mundo en su sitio y amenazar si era necesario. No permitiría que nada saliera mal.

Se construyeron unos raíles en el alcantarillado que harían de soporte de las bolsas de dinero hacia el exterior en las tres manzanas de recorrido. Bob tenía el coche y la furgoneta con matriculas robadas y la furgoneta preparada con una polea para subir a través de un agujero hecho el dinero transportado por los raíles y después subirlo por la alcantarilla. Bill se encargó de conseguir todo el material, una docena de monos de mecánico de color negro, dinamita, material de obra, las armas que pidió Mike, etc.

John Doggerty seguía desconfiando de Bill y al no recibir respuestas quiso intentar indagar por su parte a ver si podía averiguar algo, pero al paso de las semanas solo pudo ver lo hermético que podía llegar a ser Bill, al igual que la mafia, tampoco quería pasar la linea y ser descubierto, así que no tuvo más remedio que desistir. Pero John seguía sin dar crédito a que un componente importante de la mafia en Nueva York participase en algo así solo por dinero, estaba casi seguro que tenía ordenes de arriba de hacerlo por algún motivo.

Bill escaló en la ciudad a velocidades de vértigo en "Il Signore" y en su subida meteórica se ganó muchos enemigos, incluso en la misma familia de Rudo Miletti. Se había oído incluso que el capo numero uno de la ciudad se lo quería quitar de encima, pero ¿como podía ser eso si lo acogió nada más morir sus padres a temprana edad?

La entrada al banco se produjo el viernes 14 de mayo de 1946 a las 9:00 de la mañana, 5 llegaron en coche y dos esperaban en el interior del banco. Bob dejó a sus compañeros y se fue a buscar rápidamente la furgoneta. Dentro estaban Bill y John vestidos de calle. El resto entraron ya vestidos con los monos negros y la cabeza tapada con pasamontañas. Entraron dando tiros, Bill y John tiraron gases en la entrada ,aturdieron al guarda de seguridad nada más entrar, Toni cerró la puerta principal y puso unos explosivos para que nadie pudiese acercarse. Sacaron a todo el personal de la zona de atención al público y a todos los clientes (unas 40 personas) incluidos Bill y John. En fila obligaron a dos personas a atar las manos de todos a la espalda, Petersen se dirigió a las cajas y empezó a abrirlas para llenar el primer saco, Mike cogió a 8 personas de los rehenes y los aparto en una sala. En ella obligaron a todos a quitarse la ropa y ponerse los monos y los pasamontañas, luego les taparon los ojos y los dejaron sentados en el suelo de la sala que cerraron con una fuerte cadena  y un candado. Bill y John salieron conjuntamente con Mike. Una vez fuera, Buster y Toni bajaron a la cámara acorazada, Buster se dirigió con el material de obra para para preparar la huida haciendo el boquete en una esquina del suelo al fondo de la sala de entrada mientras Toni preparaba los explosivos para hacer explotar la cámara mientras esperaba a Petersen que debía abrir antes las dos puertas metálicas de entrada.

La policía empezó a llegar al Banco, primero 3 unidades y viendo la magnitud de la situación llegaron cerca de 20 coches de policía que se asentaron delante de la puerta. Petersen acabó con las cajas y fue con el primer saco para abajo, allí se dispuso a abrir la primera de las puertas metálicas mientras Buster empezaba a agujerear el suelo.

Al ver a la policía, Bill ordenó a Mike a poner a todo el mundo de pie ante los ventanales para hacer de escudos humanos, ahora había que empezar a entretener a la policía mientras los otros acababan su trabajo.
Bill dejó el tema de la negociación a John como estaba previsto, solo tenía que ceñirse al plan.

Recibieron la primera llamada del Sargento Muchowsky, preguntó por posibles heridos y John fue tajante para poner el miedo en los huesos del Sargento.

-Que queréis, estáis rodeados, yo de vosotros dejaría esta locura y no saldréis heridos.
-Esto no es un atraco al banco, es un secuestro -Dijo John -Queremos que en un plazo no mayor a 3 horas se libere sin condiciones a Duoni Bensari y a todos los componentes de su banda. Queremos dos aviones privados con piloto para la huida de Duoni en los Ángeles y la nuestra en el aeropuerto de Nueva York.
-Eso no está en mi mano, Bensari es un hombre peligroso de la mafia en los Ángeles, no tengo jurisdicción.
-Si no cumples mis condiciones empezaremos a matar a rehenes sin contemplaciones.

En ese momento sonó un estruendo en la calle, una carga explosiva con un temporizador colocada bajo un expositor de prensa explotó a las 10 en punto de la mañana llevándose un coche de la policía por delante. Lo había colocado Bill antes de entrar al banco.

- Y eso es solo un aviso - y John colgó.

Buster ya tenía trabajo avanzado y Mike bajó a ayudarle con los escombros, Petersen abrió la primera puerta. Podrían dinamitarla directamente pero el estruendo rompería de cuajo la cuartada hecha a la policía, en cambio la cámara acorazada estaba muy profunda y al explotar el estruendo en la calle sería mínimo, casi imperceptible.

A las 11 en punto Petersen abrió la segunda puerta metálica y los explosivos estaban listos solo para colocarse, El agujero estaría listo una media hora después.

El teléfono volvió a sonar, Muchowsky dijo que no podía darles lo que pedían y que tenían que rendirse o empezarían a disparar. Sonó un disparo entre la conversación, Bill disparo a uno de los rehenes en la pierna.
Muchowsky colgó desconcertado. Esto les daría más tiempo.

Una enorme explosión abrió la cámara acorazada, Bill bajó para ver como iba todo abajo y allí estaba todo ese dinero, El agujero también estaba listo, Mike subió arriba con John y Bill, Toni ,Pitersen y Buster empezaron a llenar los sacos. Por cada uno que llenaban lo bajaban al agujero y lo colgaban al raíl que desde tres manzanas más allá traía hacia la furgoneta con un sistema de manivela Bob y luego subía con la polea en la furgoneta. Se movieron 8 sacos llenos de dinero.

En la huida salieron todos por el agujero de la misma forma y corriendo cruzaron las tres manzanas hasta subir por la alcantarilla a la furgoneta. Antes sacaron a los rehenes de la sala y los dejaron allí, asegurando que si alguien se movía lo matarían. Con ello conseguirían ganar tiempo y confundir más a la policía.

20 minutos después de la huida, Muchowsky viendo que no había movimiento y que la gente empezaba a apartarse de las ventanas decidió dar la orden de entrada al banco. Lo hicieron a través de las ventanas para no detonar las cargas puestas en la puerta principal. Pasado todo el revuelo, Muchowsky pudo comprobar que faltaba algo más que dinero de la cámara y no tardó mucho en lamentarse de ello. Faltaba algo de mucho más valor que el dinero.

El grupo se repartió el dinero y cada cual se fue por su lado, menos Bill, que no cogió su parte.
Pasado un año del atraco, John seguía sin comprender lo de Bill, que no se llevó ni un centavo del robo hasta que un día leyendo la prensa se enteró de que "Il Signori", toda su cúpula, incluido alcaldes, gobernadores, policías corruptos y jueces habían sido detenidos gracias a una documentación que había llegado anónimamente a las manos de fiscales anti-corrupción procedente del New Royal. Todos salieron muy mal parados, pero el nombre de Bill "el Gato" Ranieri no salía por ningún costado. Nadie del grupo se percató que Bill cogiera ninguna carpeta con documentación, pero lo hizo.

Después saldrían los vínculos de la mafia con los negros en sus negocios de drogas y apuestas como lo que al principio parecía una lucha por el control de los barrios en realidad era una mentira. Los negros ganaban mucho dinero trabajando para los italianos. La muerte de los padres de Bill, no fue más que la tiranía de los suyos, los italianos, la familia a manos de dos negros. Así pues, Bill hizo el atraco para conseguir esos documentos y esos documentos eran la puerta a su venganza. Jamás supo de la colaboración de los negros porque siempre estaba en otros asuntos que nada tenían que ver y porque Miletti no lo permitió nunca. Pero era inevitable que Bill se enterara de todo y sabiendo como era, no tardaría mucho en hacer algo al respecto.

Quien peor acabó justamente fue Rudo Miletti, que después de sentir remordimientos por la muerte de los padres de Bill, lo acogió y le permitió ascender en la escala de la familia, Bill se vengó de él, era el que tenía más cerca de todos y del que pudo disponer de más información para que pasase el resto de su vida en la cárcel.

Nunca más se supo de "el Gato".

-Miletti, aquí tienes tu comida, una exquisitez para una personalidad como tú, a ver si con esto te haces fuerte como Popeye y consigues largarte de aquí. jajaja.
-Que mierda es esta- dijo entre sollozos. ¿Sabes quien soy? Eso son las espinacas...
-No llores, era sólo una historia para que te comieras las acelgas. jajajaja....






8 comentarios:

  1. Hola..Nada de lamentos, porque te ha quedado genial, de verdad. Desde mi más humilde opinión y mi relativa aversión al mundo que describes en tu historia, ese mundo en el que el dinero hace que una vida valga nada, te puedo decir que tu relato me ha encantado. Te confieso que estaba deseando llegar al final para ver qué se te ocurría hacer con las dichosas acelgas. Y, muy coherente y bien narrado. Felicidades. Un beso

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  2. Si este es el final de la historia, dejame decirte: ES PERFECTO!!!!!

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  3. Me encantan las historias de venganzas!
    Bravíssimo caro, un buen final para cerrar tu trilogía mafiosa :D

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  4. Pues no te ha quedado nada mal la historia al final, y eso que con las acelgas se te complicó un poco la cosa, ¿no? jajaja Cuando decíamos todos que no nos fiábamos del Gato ese por algo era, qué ojo tenemos los cuentistas, ¿eh? jeje

    Gran trilogía y curiosa forma de acabarla :)

    Muuua!

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  5. La verdad que si alguien tenía complicado este reto eras tú, y lo has salvado si señor.

    Me ha surgido un problema con tu historia, bueno no es un problema, te cuento. Me hubiera gustado saber mucho más de los personajes, esto hubiera supuesto alargar mucho más la histotia pero hubiera sido perfecto. Y la forma de contarla, a veces me daba la sensación que era alguien contando lo que ha pasado y no un relato real,no sé si me entiendes lo que te quiero decir, es que me explico un poco mal. Que es más como si tu me estuvieras contando algo que ha pasado, en vez que yo esté leyendo un relato.

    Son mis sensaciones, tampoco me hagas mucho caso. Estoy enferma.

    un besote. Ha sido un placer leerte

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  6. Un placer pasarme a leer el final del 'Plan' y eso que esta semana tenía dificultad añadida con esa frase al final, pero lo has conseguido y es el final perfecto. La venganza siempre es un plato que se sirve frío, seguramente como las acelgas que le han servido en la cárcel a Miletti.

    Besines de todos los sabores y abrazos de todos los colores.

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  7. Por fin he conseguido entrar! No veas, casi que he de trazar un plan pero no para robar un banco sino para entrar en un blog :)
    Pero vaya si mereció la pena, el fondo negro y las letras en blanco, parecerá una tontada, pero me metían aun mas de lleno en el género. No había un detalle que llevase signo alguno del s.XXI, todo está cuidado, desde el mobiliario pasando por el escenario, para recrear un NY de postguerra donde los distintos estamentos buscan crecer a través de la corrupción y las mafias buscan definir territorios.
    Mientras todo eso sucede, el plan sigue su curso, hasta que llega a su fin.

    Chapeau Yohny! :)

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  8. Llego tarde, pero llego!!!
    Le estaba calentado las acelgas al bueno de Miletti (que no sé por qué... pero me recuerda a otro ladrón, catalán esta vez, de apellido similar...).
    Vaya peazo de historia que te has marcado en estas tres semanas, ¿eh?
    Aunque yo creía que no quedaría títere con cabeza. En fin... porque no estaba yo en aquel banco, que si no... jajajajaja
    Molt bé, company!!!
    Ahora hay que atacar a la siguiente frase, ¿ok? Que tiene mucha tela!!!
    Y lo siento por llegar a última hora, pero he tenido una semana con mucho que escribir y poco que leer.
    Ens veiem!!
    Una abraçada!!!

    Hell.

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